Un análisis de sangre o Hemograma no es sino un método que permite conocer nuestro estado de salud a nivel básico mediante la evaluación del estado y cantidad de sus principales componentes: los glóbulos rojos -también llamados hematíes o eritrocitos-, los glóbulos blancos -o leucocitos– y las plaquetas -o trombocitos-. Un análisis que conviene complementar con uno de carácter bioquímico para valorar otros parámetros. Le explicamos en qué consiste y cómo valorar sus resultados. Sumarios: Un ser humano adulto tiene entre 4,5 y 6 litros de sangre de los que un 78% es el plasma o parte líquida -compuesta básicamente (...)
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