La nueva Ley del Medicamento cuya tramitación se hizo en 2006 fue duramente criticada tanto por las principales sociedades científicas de médicos de atención primaria como por los representantes de las principales asociaciones que agrupan a los profesionales no convencionales de la salud. Y es que la ley sólo favorecía los intereses –una vez más- de las grandes multinacionales farmacéuticas y limitaba los derechos de los ciudadanos. Nuestros representantes políticos fueron incapaces -de nuevo- de estar a la altura que cabía esperar de ellos. Sumarios: Los médicos españoles de Atención Primaria se quejan de que la formación continuada esté (...)
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