Una microbiota intestinal alterada con menor presencia de bacterias beneficiosas y mayor de bacterias patógenas da lugar a un intestino más permeable con la consiguiente reacción del sistema inmune y podría causar diabetes tipo 2 y agravar las enfermedades cardiovasculares al contribuir a la producción de trimetilamina N-óxido (TMAO),...
Suscríbase para seguir leyendo
Este texto solo está disponible para suscriptores.