Se les pidió que llevaran ciertos trajes tras una explosión nuclear para ver su eficacia
Una historiadora escocesa -la profesora Sue Rabbit Roff- ha encontrado en los Archivos Nacionales Australianos documentos que prueban que el Gobierno británico recurrió -en las décadas de los 50 y los 60- a 24 soldados australianos para utilizarlos como cobayas en ensayos nucleares atmosféricos efectuados sobre la isla de Monte Bello -en la costa oeste australiana- y en Maralinga -al sur del país....
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