Alimentarse de forma sana empieza a ser imposible
Número 154 - Noviembre 2012
Tiempo de lectura: 13 minutos
Alimentarse de forma saludable debería ser un derecho humano fundamental pero la realidad es muy distinta porque la mayoría de la producción y comercialización de los alimentos está hoy en manos de un grupo de multinacionales que deciden en gran medida lo que comemos y cómo lo comemos. Siendo las diez principales Nestlé, Coca-Cola, Kellogs, Pepsico, Kraft, Johnson & Johnson, Unilever, Mars, Procter & Gamble y General Mills. Es más, varias se han dedicado en las últimas dos décadas a adquirir toda empresa de interés que fabricara productos «orgánicos», «biológicos» o «ecológicos» presionando luego a los organismos internacionales para que se restringieran los productos que pueden llevar tales denominaciones. Sumemos a ello que otras dos multinacionales –Monsanto y Syngenta– han invadido con sus semillas y productos transgénicos los sectores agrario y alimenticio y no será difícil entender que dentro de poco resultará realmente casi imposible alimentarse de forma saludable.

Este texto solo está disponible para suscriptores.