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156
Enero 2013
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¿Estamos conectados con la biosfera?

En 1951 el físico alemán Winfried Otto Schumann predijo mediante cálculos matemáticos la existencia de una resonancia magnética entre la superficie de la Tierra y la Ionosfera. Posteriores estudios confirmarían su hipótesis y apuntarían que esa resonancia -que terminaría conociéndose como Resonancia Schumann– podría ser la conexión entre el campo magnético de la Tierra y los campos magnéticos de los seres humanos teniendo ello incidencia en nuestros procesos vitales y, por ende, en nuestra salud. Siendo elemento clave de esa conexión la glándula pineal, órgano situado en el centro del cerebro que es precisamente el encargado de segregar melatonina -hormona con complejas funciones biológicas entre las que destaca la regulación de nuestros biorritmos- y dimetiltriptamina (DMT) -sustancia natural considerada el más potente alucinógeno que existe-. De ahí la importancia que para la salud puede tener la alteración de esa conexión electromagnética existente entre los seres vivos y la biosfera de nuestro planeta.