El daño oxidativo molecular que causan las especies reactivas de oxígeno -iones de oxígeno, radicales libres y peróxidos tanto inorgánicos como orgánicos- se considera hoy causa o coadyuvante de numerosas enfermedades, entre ellas la diabetes, la aterosclerosis, el alzheimer, los daños por isquemia-reperfusión y el cáncer. Pues bien, en Japón se investiga actualmente el potencial del agua hidrogenada mediante reducción por electrólisis para afrontar esa situación ya que es muy antioxidante. De hecho se ha demostrado que atenúa el estrés oxidativo asociado a muy diversas patologías, incluido el daño hepático y el cáncer. Hablamos de un agua de pH equilibrado (...)
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