Una investigación de la Universidad de Liverpool publicada en 2006 en el Journal of Nutritional and Environmental Medicine confirmó que los productos contaminantes presentes en el medio ambiente causan muchos más casos de cáncer de lo que se creía; sobre todo de mama, testículos y próstata. Los elementos más dañinos son las llamadas organoclorinas que se encuentran en los pesticidas utilizados en las cosechas y en los plásticos. Y lo más grave es que afectan especialmente a bebés, niños y jóvenes pudiendo alterar su normal desarrollo. Es más, pueden incluso afectar a los fetos mientras están aún en el vientre (...)
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