Sr. Director: circula por Internet un email en el que un profesor llamado Vicente Tortosa Pérez que trabaja en la Universidad de Almería (España) -concretamente en la Unidad de Extensión Universitaria adscrita al Vicerrectorado de Servicios Generales con sede en Camino del Pozuelo s/n de Cuenca- advierte de que un grupo de investigadores de la Universidad de Princeton (Nueva jersey,...
Sr. Campoy: tengo 63 años y hace 6 me diagnosticaron asma bronquial. Hasta entonces no había tenido problemas respiratorios y tampoco nadie en mi familia. El caso es que llevo 25 años aplicándome Timoftol por problemas de glaucoma y tomo desde hace 5 por recomendación del neumólogo Xalatán y una inhalación -mañana y noche- de Rilast así como una pastilla de Singulair....
Sr. Director: permítame ante todo felicitarle por tan magnífica revista. Asimismo quisiera compartir con usted y sus lectores la rabia e indignación que en estos momentos siento hacia el sistema médico por lo que acaba de sucederle a mi querida madre,...
Sr. Campoy: le escribo movido por la indignación de ver -una vez más- como hasta los médicos de la llamada «nueva medicina» escamotean al ciudadano de a pie las causas reales de que enfermemos alegando que el origen está en lo que denominan «enfermedades ambientales»....
Sr. Director: adquirí hace tiempo su excelente libro La Dieta Definitiva y mi única consulta es sobre los carbohidratos complejos. Queda claro que se aconseja no combinar proteína concentrada con,...
Los edulcorantes no calóricos pueden ser peligrosos
Los edulcorantes no calóricos pueden dañar la microbiota intestinal, aumentar el riesgo de obesidad, favorecer la diabetes tipo 2 y desencadenar patologías cardiovasculares si se toman durante mucho tiempo porque sí tienen actividad metabólica a pesar de que se negaba. Lo ha reconocido por fin la Organización Mundial de la Salud (OMS) que ahora desaconseja el consumo habitual de la sacarina, el aspartamo, los ciclamatos, la sucralosa, el acesulfamo K, el advantame, el neotame y los glucósidos de esteviol procedentes de la estevia rebaudiana como método para perder peso. Lo que sin embargo omite es que según otros trabajos podrían además provocar cáncer y problemas neurológicos a largo plazo, entre otros efectos adversos.