Un año más las autoridades sanitarias y los representantes de los médicos han instado a la ciudadanía a través de los grandes medios de comunicación a vacunarse contra la gripe asegurando que es segura y además la manera más eficaz para evitarla. Y una vez más... mienten.
La verdad es que hubiera preferido dedicar este editorial a otros asuntos que también son de actualidad pero hace apenas unos días –el 16 de noviembre- comenzó a vacunarse a más de un millón de españoles ...
El Ministerio de Sanidad y Política Social que dirige Trinidad Jiménez va a destruir siete millones de dosis de las vacunas para la gripe A que compró. Y eso que ya regaló hace unas semanas otros cuatro millones ...
Llevamos años repitiéndolo: ninguna vacuna es obligatoria; ni siquiera las que figuran en el llamado "calendario común de vacunación" que algunos intentan imponer año tras año a los padres amedrentándoles con la falacia de que "más peligroso que vacunar es no vacunar".
Keiji Fukuda, director en funciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), afirmó a principios de mayo que es muy probable que el año que viene ¡un tercio de la población mundial se haya contagiado ...
La Organización Mundial de la Salud (OMS), empeñada en hacer el ridículo y perder el escaso crédito que le queda, decretó en junio pasado que la llamada Gripe A había alcanzado el nivel 6 y ya podía hablarse ...
¿Ha dejado de ser saludable comer pescado y marisco?
La pregunta del titular puede parecerle a algunos absurda pero es que hoy la inmensa mayoría de esos animales salvajes que viven en mares y océanos están contaminados por químicos industriales y metales pesados (mercurio, cadmio, plomo y estaño), infectados por parásitos (como el anisakis) o dañados por microplásticos. Y los de acuicultura están siendo alimentados con piensos elaborados con desechos de pollo, pavo y cerdo así como con harinas de soja, trigo y maíz no pertenecientes a su cadena alimentaria natural marina y no son adecuados. Es más, por increíble que pueda parecer a los producidos en cautividad se les vacuna y se les dan antibióticos, antiparasitarios, antisépticos, sedantes, anestésicos, etc. De hecho, solo en la Unión Europea hay autorizados ya más de 300 fármacos en la acuicultura, la mitad de ellos vacunas. El peligro para la salud es pues cada vez mayor.