Estamos seguros de que la pregunta que encabeza este editorial, la portada de la revista y el reportaje que publicamos en páginas interiores va a indignar a muchos médicos pero debemos ser ya claros y ...
La Medicina convencional, alopática ofarmacológica empezó hace unos años a desprestigiarse de tal modo que los defensores de la ortodoxia intentaron en un patético esfuerzo por prestigiarla de nuevo ...
Que a Hipócrates de Cros se le considere «el padre de la medicina moderna» es un auténtico sinsentido porque vivió entre los siglos IV y V antes de Cristo,...
El comité del Instituto Karolinska de Estocolmo (Suecia) encargado de otorgar el Premio Nobel de Medicina ha decidido que este año lo compartan los investigadores franceses Luc Montagnier y Françoise Barré-Sinoussi por ...
La medicina convencional no es una disciplina científica basada en la evidencia por mucho que los médicos al servicio de la gran industria farmacéutica lo repitan como un mantra ya que solo el 11% de los 3.000 protocolos que se utilizan en los hospitales y clínicas son claramente beneficiosos.
La bochornosa campaña gubernamental contra lo que los ministros socialistas de Sanidad, Consumo y Bienestar Social –María Luisa Carcedo- y Ciencia, Innovación y Universidades –Pedro Duque- llaman “pseudoterapias” y “pseudociencias” empieza a tener respuesta allí donde puede hacerse dado que la sociedad no puede contar hoy con la independencia,...
Jose Antonio Campoy: “Los partidos políticos se han convertido en pesebres, en agencias de colocación de familiares, amigos y amiguetes”
Publicamos la séptima y última parte de la entrevista a Jose Antonio Campoy que venimos ofreciendo desde el pasado 1 de octubre en la que plasma y justifica su aseveración de que la mayoría de nuestras creencias son falsas y es urgente que despertemos, pensemos por nosotros mismos, ampliemos nuestra conciencia y seamos conscientes de la realidad en la que estamos inmersos o seguiremos viviendo sonámbulos. Y en esta última entrega lo hace citando muchas de las creencias socialmente aceptadas que, a su juicio, son manifiestamente falsas y aun así fueron asumidas –y todavía lo son– por un gran número de personas. Lo insólito es que no se trata de unas cuantas creencias sino de muchísimas. Es más, propone un nuevo sistema democrático que sustituya –desafiando lo que la mayoría propugna–a la democracia partitocrática, a fin de dificultar el control del planeta por la élite globalitaria.