Sr. Director: el viernes día 4 de abril recibí en casa una llamada de la Ministra de Sanidad Ana Pastor en la que me comunicaba que quería recibirnos para ayudarnos a mí y a Vanesa....
Hola. Conozco desde hace sólo unos meses la revista -a la que me he suscrito- y no puedo por menos que agradecerles el esfuerzo que hacen compartiendo con nosotros tanta información y de tan buena calidad....
Sr. Director: tras leer en la revista el método de vitalización del agua de Johan Grander me puse en contacto con el importador para saber si podría servirle a mi madre -tiene 97 años- ya que hace poco se rompió la pierna derecha....
Apreciado Sr. Campoy: soy lector de la revista y admirador tanto de la información que proporciona como de la actitud que se refleja en muchos artículos frente a las injusticias que frecuentemente se cometen por el «yunque» todopoderoso de los miembros que componen y presiden el emporio oficial sanitario....
Estimado Sr. Campoy: soy doctor en Biología, tengo 61 años, llevo 36 de ejercicio profesional en el ámbito del tratamiento de aguas potables y residuales y quiero ante todo transmitirle mi felicitación por su interesante revista....
Estimado Sr. Campoy: vivo en un pueblecito muy pequeño de Vizcaya (Muxika) y estoy preocupado porque mi casa está a 300 metros del colegio de mi hijo de 2 años -lo que resulta muy cómodo- pero resulta que a menos de 100 metros del mismo hay instalada una antena de telefonía....
¿Ha dejado de ser saludable comer pescado y marisco?
La pregunta del titular puede parecerle a algunos absurda pero es que hoy la inmensa mayoría de esos animales salvajes que viven en mares y océanos están contaminados por químicos industriales y metales pesados (mercurio, cadmio, plomo y estaño), infectados por parásitos (como el anisakis) o dañados por microplásticos. Y los de acuicultura están siendo alimentados con piensos elaborados con desechos de pollo, pavo y cerdo así como con harinas de soja, trigo y maíz no pertenecientes a su cadena alimentaria natural marina y no son adecuados. Es más, por increíble que pueda parecer a los producidos en cautividad se les vacuna y se les dan antibióticos, antiparasitarios, antisépticos, sedantes, anestésicos, etc. De hecho, solo en la Unión Europea hay autorizados ya más de 300 fármacos en la acuicultura, la mitad de ellos vacunas. El peligro para la salud es pues cada vez mayor.