Estimados amigos: acabo de leer el artículo sobre la leche del mes de junio y me parece muy interesante. Yo hace ya tiempo que no la tomo pero me pregunto qué hay de los yogures y quesos....
Sr. Director: tras seguir la Dieta Definitiva durante seis meses y haber perdido 28 kilos -¡comiendo como una lima!- ahora tengo un problema que me gustaría exponerle: me sobra piel....
Estimados amigos: el artículo sobre el Activador GIE de Peter Gross para conseguir agua viva me parece bastante impresionante. Y me ha recordado a Ayham Doyuk cuando estuvo en España haciendo sus demostraciones....
Estimado Sr. Campoy: me gustaría dar a conocer lo que me sucedió hace unos años por si le sirve a alguien que se halle en las mismas condiciones en que se encontraba mi marido en 2009 y se atreva a enfrentarse con los protocolos médicos actuales....
Estimados señores: les conozco desde hace poco tiempo pero me entusiasmó tanto el primer número que cayó en mis manos que me he suscrito y adquirido todos los números atrasados así como algunos DVD’s del II Congreso Internacional sobre Tratamientos Complementarios y Alternativos en Cáncer....
Estimado director: el 27 de agosto apareció tanto en el diario «El País» como en «ABC» una noticia «científica» a toda plana que, con grandes titulares,...
¿Conoce las llamativas propiedades terapéuticas de la ortiga verde?
La medicina natural tradicional conoce desde hace milenios las numerosas propiedades terapéuticas de la ortiga verde y, sin embargo, la medicina moderna la relegó al ostracismo hasta hace apenas unos años, cuando unos investigadores se interesaron por ella y se sorprendieron al descubrir su amplio arsenal de principios activos. Fue entonces cuando la industria farmacéutica comenzó a estudiarla también y va confirmando, poco a poco, que posee efectivamente las propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antimicrobianas, analgésicas, antiulcerosas, inmunoestimulantes, hipoglucemiantes, galactógenas y antidiarreicas que la literatura médica herbal le había otorgado hace ya muchos siglos. Pues bien, resulta que además puede llevar a la apoptosis a las células cancerosas –es decir, a su autodestrucción o “suicidio”– lo que podría convertirla en una terapia alternativa a los ineficaces y iatrogénicos tratamientos oncológicos actuales.Se lo contamos.